Son múltiples las ocasiones en las que la incontinencia urinaria es una preocupación en el mundo de la halterofilia, el powerlifting y el crossfit.
¿Cuánto hay de mito y cuánto de realidad? En este artículo encontrarás una respuesta basada en la evidencia científica.
ÍNDICE DE CONTENIDOS
1. HALTEROFILIA E INCONTINENCIA URINARIA: CONTEXTO
En el Campeonato Mundial de Halterofilia de 2019, se proclamó campeona del mundo Lady Solis y este vídeo se hizo viral en redes:
Como tuvo una pérdida de orina, en plena competición, es normal que nos preguntemos varias cosas:
¿ES NORMAL?... ¿QUÉ OCURRE? Y más bien... ¿POR QUÉ OCURRE? y... ¿CÓMO PODRÍA NO OCURRIR?
Este artículo pretende contestar a estas preguntas tomando como base artículos científicos realizados en el contexto de la halterofilia y el powerlifting. En este caso, no contemplo la disciplina de crossfit, ya que es una actividad deportiva similar que engloba movimientos de halterofilia pero es diferente. En el siguiente enlace puedes leer sobre crossfit e incontinencia urinaria.
2. ¿QUÉ ES LA INCONTINENCIA URINARIA?
Según la International Continence Society (ICS) citado por Bo (2004) la incontinencia urinaria (I.U) es cualquier pérdida involuntaria de orina. Así, existen varios tipos de I.U. y no todas son iguales. ¿Qué tipos hay?
3.- TIPOS DE INCONTINENCIA URINARIA:
I.U. de esfuerzo:
Pérdida involuntaria de orina ante un esfuerzo, estornudo o ante una tos.
I.U. de urgencia:
Pérdida involuntaria de orina que puede ir acompañada precedida de una necesidad de urgencia.
I.U. de esfuerzo urodinámica:
Pérdida de orina durante un aumento de la presión abdominal, en ausencia de una contracción del detrusor de la vejiga. Para detectarla se realiza una cistometría.
I.U Mixta:
Une tanto la de esfuerzo como la de urgencia.
I.U. Continua
Pérdida continua de orina ante la ausencia del deseo miccional.
I.U por rebosamiento:
Pérdida de orina que se genera porque la capacidad de almacenamiento de la vejiga es superada y se debe a que el detrusor es hipoactivo
I.U atlética:
Pérdida de orina que ocurre durante la práctica deportiva en concreto y no en otras escenas de la vida cotidiana de la mujer. Este término es bastante novedoso y fue descrito por Araujo et al., citado por Wikander et al. (2019). Debemos abogar por él.
Además, en estudios más actuales como el realizado por Wilkander en 2021 estable dos tipos de I.U. Atlética:
INCONTINENCIA ATLÉTICA TIPO I: Aquellas mujeres que presentan incontinencia urinaria durante el entrenamiento pero NO en su vida diaria.
INCONTINENCIA ATLÉTICA TIPO II: Aquellas mujeres que presentan incontinencia urinaria durante el entrenamiento y TAMBIÉN en su vida diaria.
4. ¿QUÉ DICEN LOS ESTUDIOS? Prevalencia de la incontinencia urinaria en halterofilia y powerlifting.
HALTEROFILIA:
En un estudio realizado por Wilkander et al. en 2021, donde analizaron los datos 191 haterófilas que competían mostró que el 36.6% de las halterófilas habían experimentado episodios de incontinencia urinaria en algún momento de sus vidas (n=70) y 31.9% de las halterófilas experimentaron episodios de incontinencia urinaria durante los tres meses en los que se rellenaron los cuestionarios. En ellas, la incontinencia urinaria atlética se produjo en un 16,2 % de las atletas.
36.6% de las halterófilas habían experimentado episodios de incontinencia urinaria en algún momento de sus vidas. La incontinencia urinaria atlética se produjo en un 16,2 % de las atletas.
Al analizar factores asociados con esas pérdidas de orina, encontraron que ni los años practicando disciplinas de fuerza o halterofilia, el índice de masa corporal ni el número de competiciones se asociaba con la severidad de la incontinencia. Sin embargo, el haber dado a luz y la edad sí aumentaba significativamente la gravedad de la incontinencia.
Tanto la edad como el parto incrementaban la severidad de la incontinencia urinaria.
En cuanto a la prevalencia y severidad de la incontinencia en función del ejercicio, mostraron lo siguiente:
NOTA: Aconsejo que leas el artículo completo, ref. num. 4 porque aporta muchos datos y asociaciones muy relevantes.
POWERLIFTING:
En otros trabajos previos liderados por el mismo autor, Wilkander et al (2018), observó que el 37% de las powerlifters analizadas padece de I.U durante el entrenamiento y sólo un 11% en las actividades de la vida diaria.
Una de las gráficas mostradas en ese estudio donde relaciona categorías e I.U., te la muestro a continuación:
5. ¿POR QUÉ SE PRODUCE LA INCONTINENCIA EN HALTEROFILIA o el POWERLIFTING? Causas
Esta pregunta es compleja y aún presenta muchos interrogantes. Por ello, hay que dedicarle tiempo para entenderla. De hecho, lo más común que se dice en términos coloquiales es ... el suelo pélvico de la atleta está débil y ya está...Pero... NO SÓLO ES ASÍ, NI LA RESPUESTA ES TAN FÁCIL.
En los últimos años se ha estudiado en profundidad el tema, por lo que podemos llegar varias razones. Aquí hago un acercamiento divulgativo y con añadidos propios, de las expuestas en el artículo de Wilkander et al, 2018:
Aumento del diámetro del elevador del ano y el incremento del área del hiato del elevador durante la maniobra de Valsalva.
Presión intraabdominal excesiva, provocando una incompetencia en la contracción de la uretra. Esto ocurre cuando se aumenta el umbral de continencia, del que hablaremos a posteriori.
Es importante entender el centro manométrico abdominal, como lo que es. Un centro de presiones. Así, es fundamental que se entiendan los siguientes principios anatómicos y biomecánicos.
* Imagen 1: El suelo pélvico por función anatómica está diseñado para soportar la presión intra-abdominal. Existe una co-activación entre suelo pélvico y la musculatura profunda del abdomen. Sin embargo...
* Imagen 2: Existe el denominado UMBRAL DE CONTINENCIA. Si ese umbral es superado, esa coactivación se perdería y por tanto el suelo pélvico y sobre todo el esfínter de la uretra dejaría de hacer su función (de ahí la pérdida de orina).
* El uso de cinturón incrementaría estas presiones, por tanto a no ser que se trate de deporte de élite no se recomienda.
Tener una óptima fuerza contráctil del suelo pélvico de forma aislada , no se relaciona con incontinencia urinaria en el gesto deportivo según el estudio de Dos Sandos et al. citado por Wilkander (2018)
No es lo mismo saltar que realizar una maniobra Valsalva. El suelo pélvico no reacciona igual a ambos estímulos, por ello no se puede esperar lo mismo de todas las actividades deportivas. Sería una visión muy reduccionista.
En el 2018, Wilkander encontró una asociación positiva entre la carga externa (más peso levantado) que supondría más presión intra-abdominal y más riesgo de incontinencia urinaria. Al igual ocurrió con los años de práctica deportiva hiperpresivas a nivel élite, aumentaba la posibilidad de la aparición de I.U. Esas asociaciones fueron descritas en el artículo con powerlifting. Sin embargo en el realizado con halterófilas en el 2021, esas asociaciones no se encontraron significativas pero sí lo fueron el hecho de haber dado a luz y la edad.
Llevar cinturón incrementa la I.U.
Como te dije te animo que leas los dos artículos originales de Wilkander referenciados en el final del artículo.
6. ¿ES NORMAL LA INCONTINENCIA URINARIA EN DEPORTISTAS?
Pues es más habitual de lo que se piensa.
Sin embargo, habitual no debe ser sinónimo de normal. Debemos ponerle solución o atenuar al menos sus consecuencias.
Es más, según la revisión de Louis-Charles (2019), entre el 15% y el 73% de las deportistas que entrenan a alta intensidad pueden padecer I.U. Esta revisión, cita artículos que datan la I.U. en el 45.5% de las deportistas de resistencia, incluyendo esquiadoras de cross-country y corredoras. Fernandes et al. encuentran que la prevalencia de IU en un grupo de jugadoras de fútbol fue tres veces mayor que en el grupo control. Nygaard et al. encontraron que entre el 67% de las gimnastas y un 80% de trampolinistas, la I.U era habitual. Otros, dicen que el 62.2% de las corredoras de larga distancia reportan I.U.
Estos porcentajes tan altos, nos llevan a pensar que la I.U. es un tema que PREOCUPA y por tanto NOS DEBE OCUPAR a los entrenadores e intentar compensar o aliviar la excesiva presión abdominal y sus repercusiones en suelo pélvico.
7. ¿CÓMO PODEMOS COMPENSAR LA PRESIÓN ABDOMINAL EXCESIVA DE ALGUNAS ACTIVIDADES DEPORTIVAS?
1. Si el objetivo es SALUD y/o MEJORA DE LA COMPOSICIÓN CORPORAL, olvídate de trabajar con excesivas presiones y/o cargas. NO SON NECESARIAS. Eso no implica que no se mejoren los niveles de fuerza, entrenando con cargas altas. Además, como he descrito en este post, algunos autores han observado que la severidad de la incontinencia urinaria aumenta tras el parto y con la edad. Por ello, hay que saber progresar o regresar adecuadamente el entrenamiento para que vuelvan a mover carga sin riesgo para su suelo pélvico. Aplíquese tras el parto, en menopausia, etc.
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2. Si el objetivo es RENDIMIENTO (y con esto no me estoy refiriendo que se anteponga la salud a ser la que más levanta del box o del barrio, sino a nivel élite) compensa tu plan de entrenamiento específico con:
Entrenamiento hipopresivo (ideal antes y después de la parte principal).
Contracciones voluntarias de suelo pélvico (asegurándose que se realiza con la técnica adecuada).
Evitar Valsalvas en todas las series y sustituirlas por regla de la E (exhala en el esfuerzo).
No utilizar siempre el cinturón. Si buscas rendimiento, alterna series con cinturón y series sin él.
Evalúa mediante un cuestionario y de forma sencilla para detectar si se padece esa incontinencia urinaria. Te aconsejo el ICIQ-SF. Haciendo click aquí te lo puedes descargar.
Tratarse con una fisioterapeuta en el caso de que haya alguna patología y realizar mínimo una evaluación anual.
Tras un parto, la vuelta a la vida deportiva debe ser progresiva y muy personalizado, debido a la gran heterogeneidad en cuanto a la recuperación de su centro abdominal, suelo pélvico el incremento de la severidad de incontinencia urinaria prescrito por algunos autores.
Si la deportista ya tiene este problema, no la sometas a la vergüenza de que pierda orina en un campeonato mundial. Hay sistemas como los conocidos paraguas o similares o simplemente una compresa, para que no se hable de eso y sí de su resultado. Sé que el rendimiento y la salud en ocasiones están más distanciados de lo que nos gustaría pero estoy segura que la empatía en estos detalles la debemos tener todos los entrenadores con y para nuestras deportistas. Cuidar al deportista también incluye estos grandes-pequeños detalles.
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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS:
Bo, K. (2004): Urinary Incontinence, Pelvic Floor Dysfunction, Exercise and Sport. Sports Med 2004; 34 (7): 451-464 REVIEW ARTICLE 0112-1642/04/0007-0451/$31.00/0
Wilknader et al. (2019): Prevalence of urinary incontinence in women powerlifters: a pilot study. Int Urogynecol J. https://doi.org/10.1007/s00192-019-03870-8
Louis-Charles et al. (2019): Pelvic floor dysfunction in the female athlete. Current Sports Medicine. doi: 10.1249/JSR.0000000000000563
Wikander L, Kirshbaum MN, Waheed N, Gahreman DE. Urinary Incontinence in Competitive Women Weightlifters. J Strength Cond Res. 2021;Publish Ah. doi:10.1519/JSC.0000000000004052
🪧Sabemos que el plagio no te gusta, ¡a nosotros tampoco! Te agradecemos por ello, en señal de respeto a nuestras horas de realización de este artículo, que si lo utilizas, nos cites así 😀:
Romero-Gallardo, L. (27 de Julio de 2022). Incontinencia Urinaria y Halterofilia. El blog de OWA. www.owacademy.com/incontinencia-urinaria-y-halterofilia